La problemática epidemiológica por la que atraviesa el mundo y por ende nuestro departamento y su capital Sincelejo, es un tema que nos concierne en calidad de coadministradores, por ello he venido realizando un seguimiento al comportamiento del Covid-19 en nuestra región y realizando consultas con conocedores del tema, lo que me ha permitido en mis intervenciones en la Duma Departamental, hacer un llamado a la realización de acciones contundentes que nos permitan mitigar el impacto que el contagio va a causar, y en aras de ese llamado considero pertinente manifestar mi punto de vista frente a la manera como se debe abordar el tema de la prevención de contagios en el mercado público de Sincelejo, sin que se vea afectada la prestación del servicio en el centro de abastos mas grande de la región.
Considerar la posibilidad de cierre definitivo por un lapso de tiempo del mercado público, sería inapropiado tanto para la economía familiar del comerciante de abastos, víveres y abarrotes, como para el consumidor, llámese tendero de barrio, carretillero, jefes de hogar y hasta reciclador; quienes serían los mas afectados con esta medida.
Las acciones a tomar no pueden ir en contravía de las necesidades básicas de la comunidad, es por ello que conmino a los entes gubernamentales del orden municipal y departamental, y a los administradores del mercado publico de Sincelejo a la concertación de un mecanismo expedito que permita el levantamiento e implementación de los protocolos de bioseguridad en cada uno de los puestos del mercado de manera más estricta, esta acción a efectos de no paralizar las ventas y favorecer en estos momentos de crisis económica.
Los dueños de las colmenas deberá contar con apoyo del personal vinculado a la Alcaldía municipal y a la Gobernación para su levantamiento, elaboración y aprobación. Se me ocurre pensar, en la elaboración de un protocolo matriz por cada actividad económica que se ejerza.
Simultáneamente recomiendo la realización de campañas pedagógicas que incentiven la cultura de la prevención y concientización de las implicaciones a la inapropiada aplicación de dichos protocolos.
Finalmente también invito a la fuerza pública y administradores del mercado público a la aplicación de las restricciones expedidas por el Gobierno Nacional y local en cuanto a las medidas de protección para quienes de manera permanente deben ingresar a laborar en el lugar, no podemos pasar por alto la situación económica de las familias que laboran en el mercado público y las que dependen de lo que allí se vende, el virus no puede ser más fuerte que nuestra fuerza de voluntad y nuestra disciplina para acabarlo, solo debemos articular de mejor manera la estratégica para ganarle la batalla a esta crisis sin precedente.
Luis Alfonso Álvarez
Diputado CD Sucre